viernes, 15 de enero de 2021

A BOCAJARRO Mendilibar, Zidane y Simeone

 Fabián Orellana vuelve a estar ausente, taciturno, no habla con sus compañeros. Su entrenador percibe su melancolía, pero no sabe qué hacer. Decide trasladar su preocupación a un miembro de la plantilla, un jugador con peso en el vestuario. Tal vez, él sepa cómo actuar. El enviado habla con Orellana y descubre que el chileno ha discutido con su pareja.

—No te preocupes, yo me encargo, le tranquiliza.

Entonces ese futbolista coge el coche y acude a una tienda de confianza situada en una ciudad cercana. Allí compra un regalo de reconciliación para la pareja de Orellana. Un par de días después, el chileno recupera la alegría. Todo está arreglado. De momento.

Esta escena sucede en un vestuario de Primera División unos años antes de que Orellana y José Luis Mendilibar crucen sus caminos. Hasta entonces, el talentoso y volcánico jugador coleccionaba desencuentros con sus entrenadores. El último y más sonado, ser apartado del Celta por Berizzo tras una fuerte discusión. Después, unos meses grises en el Valencia de Marcelino. Y ahora, el Eibar de Mendi.





miércoles, 6 de enero de 2021

El Rally Dakar, al servicio de la dictadura saudí

 

  • Los inventores del rally no vendieron a Arabia Saudí la organización de la prueba, que arrancaba este domingo, para promover el deporte del automóvil, se trata de una estrategia para ayudar al despótico e intolerante régimen de Riad a mejorar su imagen internacional
  • En 2019, se permitieron en el país 180 ejecuciones capitales mediante la decapitación con espada, la crucifixión o lapidación; una cada dos días, de media


Sebastian Loeb y Daniel Elena, en acción durante la 2ª etapa del Dakar 2021 entre Bisha y Wadi Al Dawasir, en Arabia Saudita. 

EFE
Los 322 participantes en la 43ª edicición del Rally Dakar –heredero del París-Dakar, que por segundo año consecutivo se ha convertido en una especie de tour automovilístico por Arabia Saudí–, que daba comienzo este domingo en Yeda, probablemente piensan que van a participar en una competición deportiva. Durante 12 días, pueden creer que su habilidad para conducir por el desierto, su dominio de la conducción en la arena y su resistencia a la fatiga serán puestos a prueba. Pero están equivocados.
En realidad, son figurantes de una enorme operación de comunicación política diseñada para hacer olvidar al mundo la naturaleza medieval y tiránica del régimen saudí. Asesorado por varias agencias de comunicación francesas –Publicis Havas, Imagen 7– el príncipe heredero Mohamed bin Salmán, más conocido por sus iniciales MBS, que gobierna de facto el país en lugar de su padre, decidió hace dos años comprar el guirigay mediático planetario que acompaña al rally desde su creación en 1979, con el fin de modernizar la imagen de la monarquía wahabí. 
Mas en https://www.infolibre.es/noticias/lo_mejor_mediapart/2021/01/06/un_rally_dakar_servicio_dictadura_saudi_115104_1044.html